Cuando necesito terminar rápido una ilustración en acuarela, me saca de apuros el pincel recargable, ya que este hace que evite tomar agua del vaso y que fluya más mi espontaneidad al pintar, se desliza suavemente sobre el papel y es muy fácil de limpiar. Es de mis herramientas preferidas ya que es portable, siempre lo llevo en mi cartuchera, me permite pintar en cualquier lugar, sobre todo, cuando llega la inspiración, ya que le puedo dejar el agua en su contenedor (el pincel tiene tapa) y pinto con mis acuarelas cuando quiero ¡es lo máximo!
Entonces, ¿Qué es un pincel recargable? Los pinceles recargables, rellenables o también llamados pinceles de agua se le denominan así porque en su mango de plástico disponen de un depósito contenedor que se rellena principalmente con agua; sus cerdas son sintéticas y de color blanco, viene en diferentes formas, hay de diferentes tamaños: delgado, mediano y grueso. Funciona con acuarela y tintas a base de agua. Ideal para difuminados y degradados. Recomendado para ilustración con tintas, cómic, manga y caligrafía, tambien se usa para cargar con agua y difuminar los colores pasteles, temperas, acrílicos y la que más me gusta acuarelas en pasta, es muy practico y eficiente.
Tener cuidado con las marcas baratas, cuando el pincel no es de calidad, las cerdas se caen con facilidad, el agua no fluye al trazo y termina dañando la ilustración, ademas quedandote sin pincel. Me gusta la marca Pentel Japones, ya llevo 10 años con ese pincel y está intacto.