Para algunos, hablar un segundo o tercer idioma es tarea fácil: lo aprendieron desde que eran pequeños, o bien tuvieron facilidad para dominarlo a lo largo de sus años escolares. Pero para otras personas (¡la gran mayoría de los mortales que pisamos este planeta!), lograr el dominio de un idioma diferente al que utilizamos como nativo, puede ser un desafío muy grande y demasiado difícil de conseguir. Incluso, muchos desertan de sus clases de idiomas en una etapa temprana porque se sienten frustrados o que les es demasiado difícil entender lo que el profesor les está tratando de enseñar.
Por eso, si eres profesor de inglés y quieres dar las mejores clases y que tus alumnos sean constantes y permanentes en el tiempo, aquí te entregamos algunos consejos para adaptar tu metodología o entregar tareas a tus alumnos y alumnas que les permitan sacar su máximo potencial, aprender en forma rápida y efectiva, y no desertar de tus clases.
Sabemos que muchas veces se necesita más que motivación y la excelente disposición de los profesores: estímulos externos, más allá de las clases, pueden ser la clave para integrar de mejor manera lo aprendido y sentir que lo estudiado ha valido la pena y la inversión. Si quieres que tus alumnos sean los más exitosos, te recomendamos estas formas de potenciar su aprendizaje.
Si tienes alumnos que están dando sus primeros pasos, y recién comenzaron sus clases de inglés contigo, les puedes pedir que vayan anotando lo que aprenden de su profesor de inglés en un cartel o pizarra: pueden ser los colores en inglés, los días de la semana, los números, o ciertas palabras o frases. De ese modo, podrán practicar cómo se escriben, y los tendrán a diario a la vista para que su cerebro las incorpore de manera definitiva. Puedes pedirles que cambien estas anotaciones semana a semana o mes a mes, a medida que vas cambiando la materia que revisas con tus alumnos y que los ves progresar.
Tips para enseñar a tus alumnos el idioma: aprendiendo inglés
Utiliza películas y series en inglés: La pantalla es un pasatiempo común, y es muy probable que tus alumnos disfruten de ella, por lo que una excelente forma de mejorar su dominio del inglés y su motivación para tus clases es que utilices contenidos o les recomiendes ver en este idioma la televisión o lo que consumen en plataformas de streaming. Si ya logran entender con más facilidad, puedes incluso pedirles quitar los subtítulos: estarán ejercitando su capacidad auditiva y su cerebro a comprender todo en inglés, y si ven o utilizan contenidos audiovisuales en conjunto, hará que tus clases sean mucho más dinámicas y entretenidas para tus alumnos.
Música en inglés: Es muy común que los profesores de inglés utilicen canciones para estimular el aprendizaje de sus alumnos, sobre todo a los niños en las escuelas. Y esto es porque es una muy buena forma de aprender de manera entretenida y didáctica, pero además porque la música tiene un efecto muy positivo en el aprendizaje: la recordación de un ritmo y entonación facilitarán que tus alumnos recuerden también la letra y lo que significa. Así que mientras más canciones en inglés añadas a tus clases, mejor.
Lectura en inglés: En las clases particulares de inglés es común que el profesor o profesora entreguen textos de distinto tipo para que los alumnos y alumnas puedan aprender nuevas palabras y conceptos, y practicar sus habilidades de lectura. Leer es muy importante: de este modo se incorpora más vocabulario y se recuerda mejor la ortografía y gramática del idioma que se está aprendiendo. Por eso, para potenciar tus clases de inglés una buena metodología es que entregues o recomiendes contenidos y textos en este idioma que sean del interés de tu alumno o alumna: pueden ser novelas completas a tus alumnos más avanzados, o simples historietas o comics con frases cortas que les sea más sencillo entender a tus alumnos de clases de inglés para principiantes. También puedes animarlos a leer diarios extranjeros o revistas, o cualquier otro contenido que les interese y que les permita poner en práctica sus conocimientos.
Motívelos a conversar con amigos, conocidos o incluso extraños en este idioma, ya que poner en práctica el habla es la mejor manera de mejorar la pronunciación, fluidez y capacidad de escucha. En tus clases de inglés puedes incluir tiempo de conversación con tus alumnos para que practiquen bastante, pero si a eso le puedes sumar otro par de horas a la semana de tus alumnos conversando con otras personas, que incluso pueden tener otro acento y forma de hablar, mejor. El interactuar de manera real en este idioma será clave para que comiencen a pensar en inglés, y de ese modo comiencen a lograr un dominio total del idioma. De hecho, puedes hacer clases conversacionales cruzadas con otros profesores de inglés: se pueden intercambiar alumnos por una sesión para que practiquen con alguien nuevo.
Más cosas que puedes hacer por tus alumnos para aprender inglés
Si tus alumnos están dispuestos, puedes pedirles configurar todo lo que tienen en inglés: su celular, su computador, su cuenta de mail, sus redes sociales, etc. Los puedes ayudar a hacer esto, y enseñarles a comprender lo básico para que sepan seguir utilizando sus dispositivos sin problema. Es una buena manera de acostumbrar a su cerebro a estar constantemente en contacto con este idioma, y de aprender palabras simples que son muy útiles en cuanto a manejo digital se refiere. Además, así estarán en permanente contacto con el idioma, y no solo durante tus clases de inglés, lo que facilitará que se sientan cercanos a esta lengua y tendrán mayor conexión con tus clases.
Además de lo desarrollado en las clases de inglés y de las tareas que les asignes como profesor particular, puedes motivarlos a algo que sea entretenido y desafiante para ellos en sus tiempos libres. Es importante que no lo perciban como una tarea ni obligación, sino como algo divertido. Puedes proponerles aprender cada semana algo nuevo que sea relevante para sus vidas, como por ejemplo la forma en que se envía una carta formal en inglés, los modismos de un país angloparlante que les interese, los nombres en inglés de los personajes de esa película infantil que les gustó tanto, o cualquier otra cosa que sea especial para tus alumnos.
Y por último, si tus alumnos pueden, motívelos a viajar: visitar un país donde se hable este idioma puede ser la mejor manera de potenciar y sacar el máximo provecho a tus clases de inglés. Si ves que tus alumnos ya manejan lo suficiente del idioma y tienen la oportunidad, desafíos a visitar esa ciudad con la que sueñan y motívelos a hablar con los locales en esta lengua. Si tú les dices que pueden, ¡se sentirán confiados para hacerlo!