María Camila Montalvo Padilla

Dar clases de matemáticas a niños y jóvenes es una experiencia valiosa, ya que permite acompañarlos en el desarrollo del pensamiento lógico y en la construcción de confianza hacia una materia que muchas veces genera temor. Una metodología que me ha funcionado mucho, es partir de lo concreto hacia lo abstracto, por ejemplo, inicio con ejemplos cotidianos y visuales, luego conecto con el concepto formal y finalmente aplicarlo en ejercicios prácticos. Cuando trabajo con grupos, también es clave promover la participación activa mediante preguntas, juegos y trabajo en equipo, de modo que el estudiante sienta que es protagonista de su propio aprendizaje. También me gusta reforzar cada avance con retroalimentación positiva, ya que les ayuda a mantener la motivación y a demostrar que las matemáticas, más que un obstáculo, son una herramienta útil y accesible para la vida.