Descripción del anuncio
Ingeniero Químico, dando clases de Matemáticas en un preicfes popular ubicado en un barrio marginal de la ciudad desde hace más de dos años. En este proceso, he aprendido a orientar mis clases en torno al aprendizaje de los estudiantes, incluso si esto implica avanzar de forma más pausada.
Esta experiencia me ha llevado a comprender el disgusto o fastidio que muchos estudiantes sienten hacia el área de las matemáticas, ya que en los colegios suelen enseñarse de manera mecánica y, en muchas ocasiones, sin relacionarlas con el día a día. Esto genera un bajo interés por aprender en estas áreas, pues se perciben como innecesarias para la vida cotidiana.
En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, surgen también nuevos retos en torno a la atención y al aprendizaje. Esto nos obliga a evolucionar nuestra forma de enseñar y adaptarnos a los desafíos que esto representa, entendiendo que la enseñanza es algo dinámico y no un proceso rígido, donde el estudiante solo escucha y toma nota del docente. Por el contrario, debe ser un diálogo constante, en el que ambos, estudiantes y docentes, aprendemos cada día más.