Tengo 22 años y muchas veces he oído que las matemáticas son aburridas o complicadas, pero no las veo así, creo que todo va en la persona que las enseña, llevo 2 años dando clases particulares, a niños, adolescentes y adultos, lo que tienen en común todas estás personas es que le tenían "miedo" a las matemáticas, sin embargo, siempre he dicho que estas se deben ver de manera divertida y didáctica para que de esta manera el estudiante o la persona que está en proceso de aprendizaje no se vea en un entorno "temeroso" si no que por el contrario empiece a tener confianza a la hora de involucrarse en el mundo de los numeros y las ecuaciones.
Tuve en el colegio una maestra que nos enseñaba algebra mediante juegos, retos y acertijos, era una manera chévere de aprender, es lo que suelo hacer con las personas que piden mi servicio, intento que se sientan en confianza y que cambien la idea de que las matemáticas son difíciles.
Las matemáticas se hacen divertidas cuando comparamos los numeros con objetos, es decir, si estamos operando con expresiones, podemos suponer que cada expresión es un objeto oalgo parecido, también podemos recrear actividades de la vida cotidiana para que el estudiante tenga la manera de comprender lo que se está explicando.
El lenguaje en el que se enseña también tiene mucha importancia, cada persona piensa de manera diferente, pero hay cosas que son comunes en cada quien, entonces dependiendo de la edad de la persona, de la manera de ser, debemos buscar la manera de hablar conforma a la persona, así podemos crear aceptación en la persona que está oyendo, como he dicho al principio, la manera en como se enseñan las coas, influye en el aprendizaje de la persona a la que se el enseña.